Gobernar a Través de la Deuda

«¿Qu‚ le sucede al hombre endeudado durante la crisis? ¿Cu l es suprincipal actividad? La respuesta es muy simple: paga». Expertos,pol¡ticos y editorialistas son un nimes: la deuda que grava lasfinanzas p£blicas obstaculiza el crecimiento y hace estallar eldesempleo. Los Estados deben desendeudarse a cualquier precio siquieren tranquilizar a los mercados y volver a la prosperidad. Eldiagn¢stico de Lazzarato es muy distinto: en el sistema capitalista,la deuda no es, en principio, un asunto contable, una relaci¢necon¢mica, sino una relaci¢n pol¡tica de sujeci¢n y servidumbre.Infinita, inexpiable, impagable, sirve para disciplinar a los pueblos, imponer reformas estructurales, justificar ajustes autoritarios, eincluso suspender la democracia en beneficio de «gobiernos t‚cnicos»subordinados a los intereses del capital.La crisis de 2008 aceler¢ la conformaci¢n de un «nuevo capitalismo deEstado», que confisca la riqueza social mediante el impuesto. En uninquietante retorno a las v¡speras de las dos guerras mundiales, elproceso de acumulaci¢n est  gobernado por el capital financiero, queabsorbe sectores no rozados a£n por ‚l, como la educaci¢n, y tiende aidentificarse con la vida misma. Ante la cat strofe actual y eldesastre anunciado, urge salir de la valorizaci¢n capitalista,reapropiarnos de nuestra existencia, nuestro saber-hacer, nuestrastecnolog¡as, y reconectarnos con lo posible organizando colectivamente un frente del rechazo.