¿Necesitas ayuda? Llámanos al 967 225 863
de ALBADALEJO ALBARRACÍN, DIEGO
de ALBADALEJO ALBARRACÍN, DIEGO
Aquellos primeros años 80 fueron años de buena música, heroína,liberación sexual, buen cine y mucha marcha, pero era difícilencontrar trabajo. La Vanguardia del domingo apenas daba opciones para mensajero en moto (las mensajerías de aquella época crecían comosetas? duró hasta que se inventó el fax) y de prostituta. Ninguna delas dos opciones me gustaba, así que deambulaba en busca de un trabajo que pudiera ser compatible con mis estudios. Cuando uno explica una experiencia a otro, cuando se produce elfenómeno de la Ajeriencia, no hay clases magistrales, no haymentoring, ni ejemplos, no se le dice al otro lo que tiene que hacer.Simplemente se está compartiendo una información que puede cambiar amejor la vida del ajeriente, que en su contexto y con sus idealesutilizará la información a su manera, para obtener un resultado mejor.